Algunas reflexiones

Buenos días. 

Soy Ána Álvarez López. Por si alguien no está al corriente, soy profesora de Historia y he acompañado a Astrid a Berlín. Una experiencia estupenda, porque se aprende mucho de mirar a otros y porque es agradable mirar a otros con una persona igualmente agradable a nuestro lado. Aprovecho para darle las gracias a Astrid por haber trabajado tanto para que algunos de nosotros tuviéramos la oportunidad de aprender cosas nuevas.

En este post querría aportar algunas reflexiones que me surgieron a propósito de la visita a la Schule berlinesa. No son axiomas, son reflexiones: no busco que estéis de acuerdo, pero sí me gustaría que me escucharais (o me leyerais, en este caso).

1ª reflexión. En este centro, y por lo que parece, es general, se entregan los exámenes a los alumnos. Salvo los equivalente a la EVAU, que se custodian en el centro al que se adscriben los alumnos, los demás pasan a manos de los chicos. Cuando una de las profesoras de Biología nos lo contó, nuestra reacción saltó automáticamente: "¿Y si los alumnos o los padres protestan por la nota y quieren ver el examen?" Respuesta: "Pues se les cita y traen el examen y se les explica la nota". Pregunta "¿Y si han perdido el examen? ¿Qué hacéis?" Respuesta: "Ah... pues eso será cosa suya ¿no?... " Lo que realmente me llamó la atención no fue la respuesta de la profesora, que en realidad era bastante evidente, sino su cara de estupor ante la idea de que alumnos o padres pudieran venir a protestar por una nota, y no tener el examen pudiera suponer un problema PARA EL PROFESOR... Yo he estado siempre en contra de dar los exámenes a los alumnos (aparte de que no podemos hacerlo porque por ley debemos guardarlos en los institutos ... creo...), porque... pues no sé por qué, la verdad... y después de ponerme a pensarlo detenidamente, he cambiado de idea. ¿Por qué no darles el examen? Nosotros lo ideamos, ellos lo realizan, es suyo más que nuestro, creo, no sé. Y sobre todo pone la RESPONSABILIDAD de lo que se ha realizado en un examen donde está: EN EL ALUMNO. 

2ª Reflexión. Dentro del mismo universo de ideas, muchas pequeñas cosas que podían verse en la Schule reafirman esta noción de ... no es refuerzo, es.. como de reconocimiento de que hay comportamientos que responden a una responsabilidad personal que se pide que las personas tengan (al menos en una cultura digamos europea en sentido amplio): la puntualidad, el respeto a lo que otra persona está diciendo, y que se manifiesta en una actitud de escucha SILENCIOSA, el respeto por el trabajo de otras personas que queda patente porque NO USO EL MÓVIL mientras otra persona está trabajando para mí y para otros que tienen derecho a no ser perturbados sin motivo por mi actitud, etc. ¿Os suena algo de lo que estoy diciendo? La cuestión es que los alumnos llegan tarde y no pasa nada, entre otras cosas porque no perturban lo que está ocurriendo en el aula. En general, entran en silencio, se sientan en silencio y en silencio sacan el material (o no). El profesor registra por escrito el retraso o la ausencia, pero no hay penalización. ¿Por qué? Porque "en el pecado llevan la penitencia": el alumno que llega tarde, sabe que se ha perdido un trozo de clase, él sabrá lo que le cuesta a la larga. El móvil no se prohíbe en clase: muy pocos alumnos lo sacan, y cuando lo hacen es para mirar el mensaje y volverlo a guardar. En algún momento vimos como tecleaban una respuesta, para guardarlo acto seguido. En las zonas comunes, entre clase y clase, se ven móviles... pero no muchos... No llegué a preguntar a ningún alumno por su concepto de uso del móvil, y lo siento... Para los profesores, no era un problema porque no era un problema. Y además: ELLOS SABRÁN. Volvemos al mismo concepto: la RESPONSABILIDAD. Yo no soy responsable de que un alumno hable en clase constantemente, de que se pase la clase tecleando con el móvil, de que llegue tarde un día sí y otro también. El responsable de su comportamiento es ÉL (o ELLA), y Él (o ELLA) serán los que a la larga obtengan las consecuencias de su comportamiento. ¿Qué hago yo ante esta idea? Ehhhh.... no me gusta nada la impuntualidad, y menos la reiterada que se defiende con chulería, ... considero que debe penalizarse de alguna manera (sobre todo, la que va con chulería) y... pues no sé. Y en cuanto al móvil, de momento no tengo remedio: NADA DE MÓVIL EN LAS AULAS, y casi si me apuras, ni en el centro... Pero aún le ando dando vueltas, así que en cuanto al móvil "si no le gustan mis principios, tengo otros", de momento. Pero en cuanto a RESPONSABILIDAD, me parece claro: en las edades en las que nos movemos, cada uno es responsable de su comportamiento. Si nosotros hacemos el idiota, nosotros tendremos que asumir las consecuencias. No es complicado. 

3ª Reflexión. Esta es más académica. Los objetivos de la enseñanza, tal y como aparecían expresados en las agendas y nos comentaron algunos profesores de viva voz, no eran solamente que los alumnos adquirieran ciertos conocimientos (los famosos "contenidos"). Lo principal era que los alumnos (y las alumnas, por cierto) aprendieran a hacer una serie de cosas, una serie de capacidades de acción. Se ordenaban por niveles. En el primer nivel, hay que saber Describir, definir, presentar, estructurar, nombrar, resumir y Justificar. En el segundo nivel, además de todo lo anterior, tienen que comparar, explicar, analizar, caracterizar, discutir y debatir. Y en el tercer nivel, deben interpretar y juzgar, tomar posiciones, pronunciarse sobre algo. A muchos (o a todos) de nosotros, esto nos suena a cosas como "taxonomía de Bloom" o formulaciones pedagógicas similares... Claro. Pero sin referirnos a la pedagogía (no me matéis, pero me aburre), la cuestión me parece de sentido común. Claro que los chicos tienen que saber cosas, pero ¿se puede saber algo sin comprenderlo, explicarlo, analizarlo, saber contarlo y expresar una posición al respecto? Yo creo que... mmmm... ¿me atreveré a decirlo? Yo Creo que NO. ¿Qué hago yo al respecto frente a esta conclusión? Ah, eso ya no es el objeto de este post...

Me voy a despedir pidiendo excusas por un post tan extenso. Pero el tema, creo, da para mucho. Y quería añadir algo: no creo que el sistema alemán (o el francés, o el italiano, o el checo, o el de Marte) sea mejor, o peor, que el nuestro. No he ido a Berlín para decir "tecnología alemana a su alcance" ni "qué mal está la enseñanza en España", y hacerme cruces de lo bueno que es lo extranjero y lo malo que es lo nacional. No vengo a dar lecciones de "europeísmo" porque he pasado una semana en Berlín. Simplemente he expuesto ciertas reflexiones ante lo que ha visto. La enseñanaza en España no es ni "mejor, ni "peor": diferente. Y mejorable, como todas. Lo único que reivindico es la capacidad de mirar cosas que antes no conocíamos y reflexionar al respecto para sacar de ellas un aprendizaje. Sería interesante que concluir "esto no me interesa, esto es una tontería" proviniera también de una reflexión ante "esto". 

Un saludo, que paséis un buen día.